Justo al inicio del parón veraniego, se comentaba que Red Bull despediría al piloto mexicano Sergio “Checo” Pérez, pero después de unos días el equipo salió a desmentir la información y ratificaron al piloto al menos hasta el final de temporada.
También se llegó a manejar que Liberty Media (dueños del Grupo Fórmula Uno) había hecho una petición especial, al solicitar que no despidieran a Checo pero rápidamente el equipo salió a refutar dicha información y aclaró que no era verdad, que la decisión fue tomada internamente.
La lucha de equipos es mucho más interesante ahora, después de haber descansado y despejado la mente, aunque hay equipos que regresan con mayor presión, como es el caso de Ferrari, quienes luchan por no desmoronarse más y más, demostrar que son un equipo competitivo, y además tratarán de corregir estrategias de equipo durante las carreras, las que han sido su peor “enemigo” desde hace ya dos o tres temporadas atrás. Otro caso importante de mencionar es el de la escudería alemana Mercedes. Ellos tienen como obligación demostrar que ganar dos de las últimas tres carreras no fue casualidad, y tendrán que dejar en claro que es por el trabajo que se ha realizado y los aciertos en estrategias. Y el siempre mencionado, Checo, es quien más presión tiene, tanto Helmut Marko como Christian Horner han mencionado que tienen plena confianza en él, y ahora debe darles motivos para seguir creyendo. El director de rendimiento de Red Bull, Pierre Wache, mencionó que habrá mejoras para ambos coches buscando el mejor rendimiento para los dos pilotos, ya que anteriormente se había admitido abiertamente que las modificaciones en el monoplaza del mexicano habían sido pruebas para poder mejorar el rendimiento de Max Verstappen.
Todo parece indicar que en este regreso Red Bull es el equipo más “ahorcado”, ya que si bien aprovecharon las vacaciones para descansar y estudiar, también adelantaron que a partir del Gran Premio de Italia utilizarán lo mejor de las configuraciones viejas y nuevas para así analizar y crear nuevas mejoras. Pero hay algo que no podemos dejar de lado, Max Verstappen es “El León Holandés” y le toca dar la cara, es su carrera de casa y con su gente, y sabiendo de su talento, sería ilógico descartar para este fin de semana una pelea fuerte por parte de Max. Además, tiene las estadísticas a su favor, desde el regreso del circuito de Zaandvort en 2021, sólo ha habido un ganador y es él.
McLaren, tiene presión “a medias”. Actualmente son el equipo más completo, están haciendo casi todo bien, sus estrategias y el manejo del “ego” de su piloto principal, Lando Norris, puede tirar todo el trabajo que hasta el momento han hecho a la perfección. Oscar Piastri, quien recientemente ganó su primera carrera, es un piloto que hasta el momento ha seguido las órdenes de equipo dentro y fuera de la pista, ha sido un compañero que todos quieren tener, pero dudo mucho que la paciencia esté ahí para siempre.
Cabe mencionar que Checo tendrá un cambio muy importante para esta carrera, su ingeniero de carrera, Hugh Bird, o “Pajarote”, como le dice el piloto mexicano, pidió un permiso especial para presenciar el nacimiento de su hijo. Richard Wood, quien normalmente se desempeña como el ingeniero de rendimiento del equipo del Toro Rojo, va a ser quien tome el lugar de Bird por al menos cuatro carreras, aunque en este GP Hugh aparecerá como asesor de Wood para liderar la carrera de Checo.
No es la primera vez que ‘Woody’ trabajará con Sergio. En Imola estuvo presente en las prácticas y habló directamente por radio con el piloto brindándole información que consideró importante en el momento. No hay que dejar lado esta información, ya que recordemos que Hugh Bird ha sido duramente criticado y también ha sido mencionado por Sergio, solicitándole mayor actividad durante las carreras y “regañándolo” abiertamente en la radio. Puede ser que al final todo se acomode para que el tapatío tenga nuevo ingeniero y un nuevo voto de confianza de su equipo.
Veremos qué pasa.